Una mujer es…
Una mujer es la voz que alienta, es un silencio que espera.
Es una llama eterna en la hoguera de mi corazón peregrino.
Una amiga que atesora los secretos de mi pecho.
Una caricia suave en la tempestad de mis delirios.
Es la hermana cautelosa, que alivió mis heridas en la espinosa adolescencia.
Es la madre que regala los afanes que Dios puso en su mano.
Es una flor perenne en los jardines de mi infancia.
Un diamante puro en el cielo de mi vida.
Es un corazón alado, es un vuelo perfecto.
Es el viento que ahuyenta pensamientos negros, dolores del alma. Es la brisa que acaricia mis alegrías tempranas.
Es la mano que acoge, y son sus ojos dos soles repartiendo luz a raudales.
Es la compañera que guía mi sombra en la ruta de los días, en la eternidad de la primavera.
Es la madre que regala, que acaricia, que ama, que crea, y que el milagro aguarda.
Es la hija dilecta: amanecer claro, afán de cada día.
Es la maestra, que ilumina, porque es la antorcha de mi escuela querida.
Es un regalo de la vida, es un milagro del amor. Porque ella es la vida misma, porque ella es el amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario